Viernes 29 de Marzo de 2024 01:40 hs
Home Destacadas Cámaras de seguridad de San isidro: Detuvieron a banda de gitanos acusada...

Con la ayuda del Centro de Monitoreo de San Isidro, la Policía bonaerense con apoyo del personal del Patrullaje Municipal detuvo en el barrio La Calabria a tres delincuentes que pertenecían a una banda de gitanos acusada de múltiples estafas a ancianos con distintas modalidades.

A través de una de las más de 1.400 cámaras de seguridad instaladas en el distrito, desde el Centro de Monitoreo observaron un vehículo Renault Clío de color blanco que había sido alertado para su identificación, a raíz de haber participado en varios hechos delictivos en el distrito.

Se lo observó circular por Av. Centenario y girar en la calle Roque Sáenz Peña. Luego se dio aviso al 911 y a los móviles del Patrullaje Municipal. El sistema de identificación de patente confirmó que se trataba del vehículo buscado.

Después de un seguimiento el auto fue interceptado en la esquina de las calles Avellaneda y General Paz. Descendieron dos hombres y una mujer. Al ser revisados se encontró entre sus ropas dólares estadounidenses, pulseras y cadenitas de oro. Fueron trasladados a la comisaría Primera como “Averiguación de Ilícito y Resistencia a la Autoridad”.

 

Una vez alojados en la dependencia policial, las autoridades judiciales intervinientes determinaron que se trataba de una banda que actuaba en zona norte engañando a sus víctimas con el “cuento del tío”, logrando ingresar a sus viviendas y luego intimidándolas para robarles dinero y joyas. Los detenidos están imputados en al menos diez hechos delictivos en la zona de San Isidro y Vicente López, pero estiman que estarían involucrados en muchos más.

Según fuentes policiales, primero marcaban dónde vivían los ancianos y averiguaban si tenían dólares u otra moneda extranjera; luego iban a la casa e inventaban una historia que variaba según el caso: se hacían pasar por familiares de las víctimas o simulaban ser empleados bancarios y hacían un cuento para que los jubilados les dieran el dinero. Además, en algunos casos, cuando notaban que el cuento no funcionaba, ataban y reducían a sus víctimas para desvalijarlas.

El hecho quedó a disposición de la Justicia.